El presidente Joe Biden celebra la noticia, aunque estas fábricas no estarán listas hasta 2025 y por tanto no ayudarán a eliminar la actual crisis de semiconductores.
Intel ha anunciado que invertirá 20.000 millones de dólares en dos nuevas fábricas de semiconductores en Ohio, Estados Unidos. La compañía espera así descentralizar la fabricación de esta tecnología necesaria para dispositivos electrónicos, entre ellos consolas y tarjetas gráficas. Uno de los motivos de esta crisis de stock se debe a que la gran mayoría de chips se fabrican en Asia, y por eso muchos gobiernos están interesados en traer fábricas a su territorio -como Japón-.
La mala noticia de este anuncio de Intel es que las fábricas no estarán listas hasta 2025, así que no servirá para suavizar los problemas a corto plazo, pero al menos contribuirá a evitar que la situación de 2020 se vuelva a repetir en un futuro.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha definido la noticia como un punto de inflexión y durante su conferencia en la Casa Blanca ha destacado cómo la escasez de chips ha afectado a la industria de los automóviles -aunque como decimos, tiene una gran relación con el mundo de los videojuegos-. Samsung y Micron también se comprometieron el año pasado a construir fábricas en Estados Unidos.
Biden y las principales compañías fabricantes -Intel, AMD, Nvidia- han estado presionando al Congreso para financiar un programa que invierta 52.000 millones de dólares en la producción de semiconductores en Estados Unidos. CHIPS Act, que así se llama esta ley, fue aprobada en enero de 2021 pero parte de la financiación aún no se ha cerrado.