Riyadh ha registrado un salto mundial de 46 puntos en un índice de clasificación global para experiencias culturales de la ciudad.
Según el Informe de Ciudades Globales del consultor de gestión Kearney, que analiza el impacto de los desarrollos socioeconómicos y políticos en las ciudades y su futuro, la capital saudí logró el salto de puntos más alto en la categoría.
Desde el lanzamiento de la Estrategia Nacional de Cultura de Arabia Saudita en 2019, el Reino ha sido testigo de una expansión sin precedentes en su oferta cultural.
El año pasado, el Ministerio de Cultura registró 304 museos, 85 bibliotecas públicas adscritas al ministerio, 262 teatros, 75 galerías y salas de exhibición, 54 cines y 20 cafeterías literarias en el país.
Rudolph Lohmeyer, socio de Kearney con su Instituto Nacional de Transformaciones, dijo: “Las decisiones políticas progresistas de Arabia Saudita no solo han estado dirigiendo al país hacia un crecimiento sostenible, sino que también están salvaguardando el bienestar a largo plazo de sus ciudadanos y residentes.
“El salto significativo en las clasificaciones de Riyadh en experiencia cultural se puede atribuir al esfuerzo dedicado a dar vida a un pilar de sociedad vibrante bajo Vision 2030”.
Señaló que la clave para una economía próspera era que las personas que vivían en ella estuvieran arraigadas, conscientes y orgullosas de su herencia cultural, lo que aumentaba la probabilidad de que se comprometieran a contribuir al éxito económico.
Riyadh lideró la región en la sección de mercados de capital y se mantuvo a la cabeza de la población nacida en el extranjero. También subió cuatro puntos en la clasificación de actividad comercial y capital humano a pesar de una inflación global más alta de lo esperado, las consecuencias económicas y políticas en curso de la invasión de Rusia a Ucrania y los efectos cada vez mayores del cambio climático.
Jeddah también fortaleció su posición en las listas de actividades comerciales y capital humano, Medina subió un escalón y Makkah y Abha fueron reconocidas por su intercambio de información. Mientras tanto, Dammam ganó 11 puntos en el índice global gracias a su capital humano, intercambio de información, experiencia cultural mejorada y mayor compromiso político.
“Será importante mantener el impulso creado. Los imperativos de larga data e incluso existenciales, como los relacionados con el cambio climático, deberán permanecer enfocados.
“Este será un período en el que se pondrá a prueba la resistencia de la economía. La reinversión dentro del sistema socioeconómico local y un enfoque en el crecimiento, anclado en una toma de decisiones prudente, es lo que diferenciará a los países”, agregó Lohmeyer.